mi corazón helado como un puño
ve la vida vibrar alredeor
y se funde
y se quiebra
se muere de fervor
de ganas de adentrar-se en el hervor

el miedo es un abismo enmascarante
que te oprime hasta que olvidas quién y qué

la respiración en calma,
la imaginación en plana
y el corazón en una contracción
acechando silencios
atento
sin siquiera palpitar

y mientras yo
desayuno, cocino, escucho el debate en la radio, llamo para conseguir trabajo, quedo con los amigos, me preocupo por mi familia, por el futuro, por la injusticia, por mi ciudad y hasta por tí,
que ni te conozco y te empiezo a ver tan contraido y tan cagado como yo, que soy tu espejo mismo,

y te miro
a través del lagrimal
que se crece cubriendo todo el párpado 
y con la mirada te digo que te alejes
que te acerques
que me estampo en las esquinas
que busco portales en los que descansar
en los que discernir alguna lucidez
que me ayude a tener alguna claridad
una ilusión
que me haga sentir esa esperanza
que ahora nos roban de las manos

como si el corazón también se pudiera comprar

en que momento nos confundimos tanto que olvidamos que la vida nos es dada?